Esta última semana hemos vivido el caso "del cambio de logo de GAP". A principios de Octubre GAP anunció a través de su web y de su página de Facebook el cambio de logo de su empresa después de conservar el anterior logo durante 20 años. En Facebook lo anunciaron como el principio de muchos cambios:

Durante los últimos días las críticas han sido feroces con el nuevo diseño, el cual, a nivel particular, he encontrado muy pobre. Miles de los más de 720.000 fans de Facebook han escrito en el muro de la página pidiendo de volver al anterior logo. La situación ha llegado a tal extremo que incluso Marka Hansen, presidenta de GAP, ha tenido que publicar un post en el blog corporativo de GAP explicando los motivos del cambio:

Esta última entrada en el muro de Facebook contiene 765 comentarios. La anterior 1.077. Todos hablan del cambio de logo. ¿Puede una empresa hacer oídos sordos ante la petición de tantos clientes? Parece ser que GAP sí escucha a sus clientes, y hoy mismo ha decidido echarse atrás con la idea del cambio de logo. Así lo ha publicado en su muro:

Este caso nos enseña una vez más el poder de las redes sociales. De como Facebook no sólo sirve para hacer concursos, presentar nuevos productos, etc... sino que también nos permite tener un canal directo y bidireccional con los clientes, el cuál nos proporciona un feedback tan bestial que apenas deja margen a las empresas para que lo ignoren. Enhorabuena a GAP por escuchar a sus clientes en Facebook.
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Vaya hito, no?